Si no dudas en poner ventiladores en la habitación de los niños cuando hace mucho calor, debes tomar estas precauciones.
Durante la época de más calor, las altas temperaturas nos obligan a hacer uso de aparatos como los aires acondicionados o ventiladores para refrescar el ambiente.
El uso de ventiladores es mucho más común en los hogares, pues resultan más económicos que los aires acondicionados.
Los ventiladores en la habitación de los niños se instalan fácilmente con tan solo enchufarlos y son muy cómodos por ser portátiles.
Pero estos aparatos, al igual que muchos otros artefactos electrónicos, pueden resultar peligrosos para los niños.
Ya sea un ventilador de aspas, de techo, de pie, de mesa o de torre, los ventiladores en la habitación de los niños tienen riesgos considerables, entre los que podemos destacar:
- Los ventiladores de aspa resultan muy atractivos para los más pequeños al mirar la velocidad con que giran las aspas y el ruido que producen, por tanto se ven tentados a introducir las manos o dedos en estos aparatos. Aun cuando existen rejillas o mallas protectoras, son muchos los niños que corren el riesgo de sufrir cortaduras al acercar la mano o los dedos al ventilador, provocándose lesiones que pueden ser muy graves.
- Los ventiladores de techo no son recomendables para las habitaciones de los niños que duermen en literas. La curiosidad de los niños no debe ser subestimada, pues al tener muy cerca las aspas, pueden intentar tocarlas, colgarse o colocar cosas en ellas.
- Los ventiladores de pie o de mesa, también pueden presentar un riesgo, ya que los niños pueden intentar introducir algún objeto en el ventilador como un lapicero, un papel, un juguete pequeño o cualquier otro objeto que esté a su disposición para ver qué ocurre, lo cual es un peligro pues de romperse el objeto, los fragmentos pueden incrustarse en su cara o en los ojos. Además del daño del aparato, éste puede volcarse sobre el niño y causarle alguna lesión.
- El cabello largo también representa un peligro cerca de un ventilador. Si se acercara demasiado al ventilador, el cabello puede enredarse y el niño sufriría un doloroso tirón, o incluso habría que cortar el mechón para poder liberarlo.
Además de los accidentes que pueden producirse, el uso de los ventiladores en la habitación de los niños sin el cuidado adecuado, puede tener efectos negativos en la salud de los infantes.
- Los ventiladores hacen circular el aire por toda la habitación, pero también cualquier partícula que esté en el ambiente como el polvo, pelusas, polen, etc. Si tu hijo padece de algún tipo de alergia, no es nada recomendable el uso de ventiladores, pues los estados alérgicos pueden empeorar o producir otros trastornos respiratorios como asma, bronquitis, sinusitis y, en casos más extremos, hemorragias nasales.
- Al usar este tipo de ventilación durante la noche, se secan las membranas mucosas, encargadas de detener el paso del polvo u otros agentes peligrosos para la salud.
- También se altera la humedad natural de los ojos y de la piel, produciendo irritación y resequedad, respectivamente.
Además está la creencia que el uso de los ventiladores puede causar la muerte de las personas mientras duerme, mas no hay estudio alguno que corrobore esta creencia, muy popular por cierto, en Corea del Sur.
Sin embargo, existe un estudio publicado por la Asociación Médica Americana, en la revista Archives of Pediatrics and Adolescent Medicine, sobre el uso del ventilador y la disminución del riesgo de síndrome de muerte infantil súbita.
De acuerdo a los resultados publicados en esta revista, usar un ventilador permite que el aire circule por toda la habitación, evitando que los bebés inhalen el dióxido de carbono que producen, que es uno de los posibles factores causantes de la muerte súbita en bebés.
Se indica que el riesgo se disminuye en un 72%, en comparación con otros recién nacidos que duermen en habitaciones sin este tipo de ventilación, y que la disminución se hace aun más significativa (hasta un 94%) cuando se utiliza ventilador en una habitación calurosa.
Cómo evitar los peligros con los ventiladores en la habitación de los niños
Tomando esto en consideración, además de la imposibilidad de instalar un sistema de aire acondicionado, pueden seguirse algunas recomendaciones para evitar los peligros que representa y sacar el mayor provecho al uso de ventiladores.
- En primer lugar, optar por ventiladores sin aspas o ventiladores de torre, para evitar los riesgos que ya hemos mencionado sobre introducir manos, dedos u objetos en el ventilador.
- Coloca el ventilador para que oscile, pero sin que apunte directamente sobre el infante mientras duerme, manteniendo la habitación fresca, ventilada y evitando cambios bruscos de temperatura o resequedad en las mucosas y ojos del pequeño.
- No propiciar juegos con el ventilador, haciendo ruidos frente al aire que sale o colocando el cabello ante él para despeinarse, ya que los niños tienden a imitar lo que hacen los adultos, sin tener conciencia del riesgo que este tipo de conducta puede representar.
- Limpia con frecuencia el polvo y la suciedad de las aspas o de para evitar la posibilidad de desarrollar enfermedades respiratorias.
- Si eliges ventiladores de techo, evita colocar serpentinas o cualquier otro colgante que atraiga la atención de los niños, pues al intentar agarrarlo podrían estrangularle.
Así que puedes mantener fresco el ambiente de tu hogar y de las habitaciones de los niños, de forma económica y segura.
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