¿Quieres saber más sobre la técnica del brushing?
Todas soñamos con salir de casa con el cabello liso, perfecto y bien peinado. El pelo liso ofrece una apariencia prolija y bien cuidada pero, sin importar la textura natural del cabello, hay melenas que se niegan a ser domadas.
Para ellas se han creado técnicas destinadas a hacer que cada pelo quede en su lugar: alisado japonés, tratamientos de keratina y el uso de herramientas de calor como planchas para el pelo y secadoras.
Hay quienes se arriesgan a hacerse un alisado permanente, pero somos más las que preferimos la versatilidad que te da tener tu cabello al natural y optamos por métodos menos definitivos.
Si este es tu caso, entonces la técnica del brushing se convertirá en tu mejor aliada para tener un liso perfecto.
¿Qué es el brushing o técnica del brushing?
El brushing es el nombre técnico del peinado hecho con cepillo y secadora. Suena simple, pero tiene su arte para que cada pelo quede en su lugar y te dure hasta el próximo lavado.
No basta con pasar un cepillo mientras usas la secadora, necesitas preparación y conocer las herramientas que usarás.
Esto es lo que hace la diferencia entre un brushing hecho en la peluquería y uno hecho en casa.
Aprende cómo hacer la técnica del brushing
Busca tus herramientas
Necesitarás una secadora potente y ligera, pues estará encendida mucho tiempo y la sostendrás en tus manos mientras te peinas.
Otra herramienta imprescindible es un buen cepillo redondo. El cepillo es de vital importancia, pues es el que te ayudará a obtener un liso y brillo perfectos.
Prefiere cepillos de cerdas naturales. Para cabellos abundantes, busca cepillos grandes. Los cepillos medianos son buenos para todo tipo de cabello y tienen la ventaja de que separan las raíces y otorga flexibilidad a la melena. Puedes buscar cepillos con el cuerpo metálico, que te ayudarán a que el brushing sea más rápido pues mantienen el calor y ayudan a secar el cabello.
Si lo deseas, puedes usar productos alisadores, fijadores o nutritivos.
Todo dependerá de tus necesidades particulares, pero si recomendamos que uses algún serum o crema de peinar que ayude a proteger tu cabello del calor.
La técnica
- Lava el cabello como acostumbres, envuélvelo en una toalla para absorber el exceso de humedad. Si sigue muy mojado, seca con el secador a una distancia adecuada para eliminar al menos el 60% del agua si tienes ondas suaves y un 50% si tienes rizos. No seques el pelo muy mojado, pues como indican varios estudios científicos el exceso de calor, sumado a un champú fuerte, contribuye a dañar la fibra capilar.
- Desenreda el cabello con un peine de cerdas anchas y separa en secciones con ayuda de pinzas. Este paso es crucial, pues te ahorrará tiempo y te ayudará a mantener la humedad. Separa la parte superior, laterales y luego parte inferior.
- Comienza a secar desde abajo hacia arriba. Toma secciones pequeñas. Aplica el producto alisador y/o protector térmico ayudándote con un peine. Luego enrolla el mechón en el cepillo y comienza a estirar hacia abajo, manteniendo el secador siempre en paralelo y a unos 5 centímetros del pelo. Seca desde la parte inferior del mechón, no sólo la superficie.
- Utiliza la punta en forma de embudo para concentrar mejor el aire caliente. Al terminar de alisar cada mechón, cambia rápidamente a la función de aire frío y dale una pasada para fijar el peinado.
- Repite el proceso para cada mechón, hasta que termines con tu melena. Recuerda ir de abajo hacia arriba. Puedes usar el cepillo para darle una vuelta hacia arriba o abajo a las puntas. Si quieres que quede extra liso, puedes darle una pasada rápida con una plancha para el cabello. Recuerda siempre sellar con un poco de aire frío.
- Algunos profesionales utilizan un poco de laca sobre un cepillo y dan una última pasada al cabello. Esto ayuda a que el peinado dure mucho más tiempo sin que luzca acartonado.
- Si el cabello se seca mientras haces el brushing, puedes humedecerlo un poco con un spray. Nunca pases la secadora en el cabellos seco, pues lo debilita y rompe. No dudes en probar productos para mantener el peinado más tiempo, hidratar y proteger la fibra capilar.
El secreto para un buen brushing es la práctica. Cada cabello se comporta de forma diferente, así que con el ensayo y el error desarrollarás tus propios trucos, técnicas y descubrirás qué productos se ajustan mejor a tu rutina y cabello.